Este martes a las 18:55 el Barcelona se enfrenta al Slavia de Praga en el partido correspondiente a la cuarta jornada de la fase de grupos de la Champions League. El conjunto de Ernesto Valverde buscará una victoria que le sitúe virtualmente en la siguiente fase de la competición. Delante tendrá al conjunto checo que tanto sufrimiento le provocó en el anterior partido y que ve en el Camp Nou una última oportunidad de seguir soñando en la competición europea de clubes más prestigiosa.

Teoría o realidad. Parece que ambos conceptos se enfrentan en este partido además de las escuadras deportivas. En teoría, el Barça es ampliamente favorito y debería resolver el partido sin mayores dificultades. En teoría. También en teoría, Ernesto Valverde alineará a un nuevo tridente, formado por Dembélé, Leo Messi y Griezmann, con este último como delantero centro. Habrá que esperar hasta una hora antes del inicio si esto se hace realidad.

En la previa del partido se respira un ambiente de dudas alrededor del equipo. Si tras los anteriores batacazos todos los dedos apuntaban a la figura del entrenador, después de la derrota ante el Levante los jugadores han empezado a ser señalados. Al tratarse de un partido en el Camp Nou, el Barça debe imponerse con claridad al Slavia, incluso golear al último clasificado del grupo. Una victoria que, en caso de producirse, situaría al equipo dirigido por Ernesto Valverde en el primer lugar con 10 puntos, virtualmente clasificado para los octavos de final.

Sin embargo, el partido disputado en el Sinobo Stadium fue muy duro para los culés, que acabaron llevándose los 3 puntos pero prácticamente pidiendo la hora ante un conjunto checo que le encerró en el tramo final de partido. Ter Stegen fue uno de los jugadores destacados del Barça aquel día, un mal síntoma que no debe repetirse en este partido.

La más que probable baja de Luis Suárez hace prever la vuelta de Dembélé al once, así como la de Sergio Busquets tras la pérdida de control de partido en el Ciutat de València. Con estos dos cambios, el once que sacaría Valverde sería el formado por Ter Stegen, Semedo, Piqué, Lenglet, Jordi Alba, Busquets, Arthur, De Jong, Dembélé, Griezmann y Messi. Con ellos, el Barça buscará pasar del Camp Nou a los octavos de Champions.  

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